mercredi 31 décembre 2014

Top 10 de la Ciencia 2014 (Lado B)

Con un 2014 a punto de terminar (o terminado ya en algunas partes del orbe), continúo con la revisión de los adelantos científicos más relevantes del año (Ver Lado A). He aquí los cinco puestos de honor:


5. ¡Súpernova!

La muerte de una estrella miles de veces más masiva que nuestro sol es uno de los eventos interestelares más dramáticos del universo. Este tipo de estrellas se despiden con una muy rápida explosión (de milisegundos) cuyo brillo es capaz de opacar el de miles de millones de estrellas en una galaxia. A tan fastuoso espectáculo se le denomina Súpernova. Existen registros de observaciones de súpernovas que datan de la época de los griegos, pero, en general, nadie sabe cómo predecir su ocurrencia, a lo cual no contribuye mucho el hecho que sucedan muy raras veces. Sin embargo, se sabe que una súpernova da origen a elementos químicos esenciales para la formación de planetas y la constitución de la vida; tal como la conocemos. Es por ello que existe un enorme interés por comprender la naturaleza y los mecanismos detrás de las súpernovas. En Junio, un grupo de investigadores lograron, por primera vez, recrear una súpernova en el laboratorio. El logro fue posible gracias a la elegante manipulación de una serie de láseres de alto poder actuando en una minúscula barra de carbono encerrada en una atmósfera inerte de Argón. Este avance abre la puerta a cuestiones profundas sobre el origen y evolución estelares. Bien vale la pena recordar que somos "polvo de estrellas".



Onda de choque de una súpernova escala laboratorio. Tomado de:  http://images.iop.org/objects/phw/news/18/12/11/PW-2014-06-06-Commissariat-table.jpg


4. Eterna juventud

Desde Piccolo Daimakú (villano de Dragon Ball) hasta nazis en Indiana Jones, muchos personajes ficticios y reales han buscado, sin éxito, un elixir para la eterna juventud. Bótox, cremas rejuvenecedoras y bisturís; elementos todos alrededor de la multimillonaria industria cosmética que, sobre todo, genera ganancias a partir de promesas incumplidas: ¡No conozco a nadie que se mantenga joven a punta de la famosa crema Ponds! Sin embargo, parece ser que la vieja frase draculesca de "La sangre es vida" sí puede ser la clave para encontrar la fuente de la juventud. Este año, científicos demostraron que la sangre de ratones de laboratorio jóvenes puede rejuvenecer los músculos y el cerebro de ratones viejos. Los resultados verifican hallazgos similares que datan de más de hace 150 años y que llevaron a postular la existencia de componentes en la sangre capaces de reversar los efectos del envejecimiento. Los métodos desarrollados en la investigación han empezado a aplicarse en pruebas clínicas y en pacientes con Alzheimer. Las expectativas alrededor de estas investigaciones son enormes y con hondas implicaciones sociales y filosóficas. Al respecto de esto último, vale la pena volver a escuchar la canción de Queen: "Who wants to live forever?" (¿Quién quiere vivir para siempre?) así como (volver a) ver Highlander.



Imagen tomada de: American Association for the Advancement of Science Science 2014;346:1444-1449

3. Fusión

El suministro de energía número uno de la sociedad moderna viene dado por algún tipo de combustión. A pesar de la interesada negación de algunos sectores multinacionales, el impacto negativo de esta actividad en el ambiente es cada día más evidente; episodios más severos de los fenómenos del Niño y la Niña, elevación del nivel del mar entre otros. Los reactores nucleares actuales; basados en la división del átomo (fisión nuclear), son también problemáticos, muy problemáticos, debido al uso de materiales altamente radioactivos. Como alternativa, la fusión nuclear ha sido un sueño perseguido desde hace décadas por científicos alrededor del mundo en aras de desarrollar procesos limpios de producción de energía. El desafío principal: hacer que la energía invertida en iniciar la reacción de fusión sea menor a la obtenida en el proceso. Esto es así bajo las extremas condiciones de presión en las estrellas; pero, no en nuestro planeta donde tales condiciones no se pueden alcanzar. Este año, un avance mayor en el campo de la fusión nuclear fue llevado a cabo por científicos trabajando en el INF (National Ignition Facility) de California quienes en Febrero lograron obtener un balance positivo de energía en la reacción de fusión mediante la manipulación de potentes láseres. El hallazgo representa un enorme avance en este campo que es, en mi opinión, la mejor alternativa para detener nuestra vertiginosa caída hacia el insostenible futuro que nos estamos forjando. Además, es un buen augurio para proyectos a gran escala como ITER (ver nanociencia: Episodio II).


2. Cura a un dulce problema

La diabetes es un grave problema de salud pública y se ha asociado con otras enfermedades, no menos graves, como el Alzheimer (ver: Dulce Compañía). Además de la intensa campaña para desestimular el masivo consumo de azúcares, los científicos siguen buscando maneras de combatir la enfermedad. Investigaciones con células madres lograron este año, después de más una década de trabajo, producir las denominadas células pancreáticas β a nivel de laboratorio. Estas células son responsables de mantener niveles apropiados de azúcar en la sangre mediante la síntesis de insulina; hormona que sólo ellas son capaces de sintetizar. La denominada diabetes tipo I es producto de la muerte masiva, y auto-inmune, de este tipo de células en el páncreas y, hasta el momento, se consideraba incurable. Con el hallazgo reportado, sería posible diseñar una cura basada en la re-programación de células madre en células β. Tales células madre pueden provenir de, por ejemplo, la piel del paciente convirtiéndolas. Aunque faltan estudios para demostrar la efectividad de los tratamientos planteados, pues la enfermedad es auto-inmune, las perspectivas son mucho mejores ahora, dados los positivos resultados con ratones de laboratorio.




Producción de insulina (en verde) a partir de células β humanas transplantadas al páncreas de un ratón con diabetes después de dos semanas. Imagen tomada de: American Association for the Advancement of Science Science 2014;346:1444-1449


1. Cazadores de cometas

La decisión de la comunidad científica internacional fue unánime en cuanto a que el aterrizaje de la sonda espacial Philae sobre el cometa 67P/Churyumov-Geramisenko fue el evento científico del año. La exploración espacial no había tenido tanto rating desde los días del alunizaje norteamericano. Esta vez, el crédito, de una hazaña mucho más compleja que la furtiva visita lunar, fue para la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). Aterrizar en un cometa requiere calcular cómo interceptar un objeto que se mueve a una velocidad 40 veces mayor a la de una bala en la tierra y que despide, constantemente, materia hacia el espacio exterior. La estrategia del grupo de investigadores de la ESA fue lanzar Philae desde la nave espacial Rosetta que está en órbita alrededor del cometa 67P. Hay que mencionar que la misión de Rosetta empezó hace diez años. Desde Rosetta y Philae ha sido posible obtener imágenes inéditas de un cometa y datos que han sorprendido a los investigadores. Por ejemplo, se detectó la presencia de moléculas orgánicas (pilares de la vida en la tierra) y de una capa de polvo de espesor entre 10 y 20 cm que recubre un núcleo duro atribuido, hasta ahora, a agua en forma de hielo. Por otro lado, datos sobre la abundancia relativa de hidrógeno "pesado" (i.e. deuterio; un isótopo del hidrógeno) sobre hidrógeno convencional en el cometa, han permitido descartar una vieja hipótesis que postulaba un origen "cometario" del agua presente en la tierra. La pregunta de de dónde es originaria el agua "terrícola" permanece sin contestar e intriga cada vez más, pues, recientemente, se estableció que ésta data de antes del nacimiento del sol. Desafortunadamente, la vida de Philae sobre el 67P fue corta debido a inconvenientes técnicos, pero los datos que se recolectaron y los que sigue enviando Rosetta desde la órbita del cometa constituyen piezas fundamentales para comprender el origen y naturaleza de nuestro sistema solar, así como han abierto una nueva era de exploración espacial.



@vigabalme





Principales referencias consultadas:

1. http://physicsworld.com/cws/article/news/2014/dec/12/comet-landing-named-physics-world-2014-breakthrough-of-the-year

2. http://news.sciencemag.org/scientific-community/2014/12/breakthrough-year-top-10-scientific-achievements-2014

3. http://www.bbc.com/news/science-environment-30415007

4. http://www.theguardian.com/science/2014/dec/18/science-breakthrough-ageing-cave-art-comet-philae-rosetta-genetics#img-3


mardi 30 décembre 2014

Top 10 de la Ciencia 2014 (Lado A)

Hace un par de años, un amigo de la Universidad afirmaba con vehemencia caribe (que es un tipo de vehemencia un tanto diferente de la vehemencia convencional): "ya la ciencia no produce nada revolucionario y está estancada". Lo cierto es que lo que ha sucedido es que la ciencia ha avanzado en complejidad y su vulgarización es bastante pobre en nuestro país. Mientras que casi todos los medios de comunicación dedican secciones enteras a la astrología, la poca información científica que se resalta se incluye en secciones estilo: "Vida de hoy", por ejemplo. Además, los artículos periodísticos son, en general, imprecisos y denotan que la reportería científica nacional es muy incipiente y con poco dominio de los temas que se presentan. Bueno, pero este tema es más apropiado para una entrada en 2015.

En respuesta a mi amigo, decidí hacer una compilación de los avances científicos más relevantes del 2014; basándome en los Top 10 presentados por los portales: Nature, Science, Physics World, The Guardian y la BBC. En esta entrada (Lado A) revisaré cinco de ellos y mañana revisaré los otros cinco. El conteo está dado del 10 al 1, así que habrá que esperar hasta mañana para saber cuál fue el avance ganador.

10. Volando con dinosaurios

Desde hace tiempo, se ha establecido que las aves son descendientes directos de los dinosaurios; sí, esa gallina vilipendiada como estúpida, por muchos, es tatara-tatara-tatara...nieta de un dinosaurio.
Lo que se ha podido establecer este año es cómo y cuándo los descendientes de colosos como el Tiranosaurio Rex y el Arqueoptérix llegaron a transformarse en gráciles seres voladores como el colibrí, la garza o el tucán. En particular, se halló, a través del estudio de fósiles encontrados en China, que la aparición de plumas en los dinosaurios se dio de manera paulatina y que las mismas servían a los animales como aislante térmico y para balancear su equilibrio al desplazarse, además de como herramientas que les permitieron desarrollar el vuelo. Por otro lado, también ha sido posible establecer que los ancestros dinosáuricos de las aves fueron reduciendo gradualmente su tamaño a la vez que desarrollaban una estructura ósea más ligera y fina. Finalmente, un amplio estudio desarrollado por un consorcio internacional pudo establecer; a través de estudios genéticos, que los ancestros de las aves modernas perdieron sus dientes hace unos 116 millones de años.

Imagen tomada de: http://www.foxnews.com/science/2014/08/01/honey-who-shrunk-dinosaurs-    study-traces-how-nature-evolved-ancient-beasts-into/


9. Transformers y Yo Robot¡!

Basados en técnicas de Origami, científicos de Harvard desarrollaron una serie de pequeños robots que pueden auto-ensamblarse. Los robots y el concepto detrás de los mismos tienen potenciales aplicaciones en la construcción de satélites espaciales, por ejemplo, o en el diseño de robots para misiones de rescate en lugares de difícil acceso. Por otra parte, otros científicos, también de Harvard, diseñaron una serie de mini-robots que pueden cooperar entre sí para realizar tareas complejas en conjunto sin necesidad de un líder (¡Lo siento, pero Optimus Prime y Megatrón perdieron la chamba!). Parece que cada día estamos más cerca de los robots que vimos en "Minority Report". Como contribución final, vale la pena mencionar los robots diseñados en Francia para ayudar a niños que sufren padencias mentales. Muestra de ello es Nao; un robot que ha demostrado ser eficaz para mejorar las habilidades comunicativas de niños autistas.





8. Asuntos memorísticos

Físicos norteamericanos rusos cooperaron para construir un nuevo dispositivo de memoria holográfica (algo al estilo de los mensajes grabados en Star Wars) que hace uso de la interacción magnética de los materiales con la luz. De otra parte, científicos canadienses lograron, por primera vez, comprimir datos cuánticos. Ello implica un gran avance hacia el desarrollo de la electrónica cuántica; cuya capacidad de almacenamiento de información y rapidez de cálculo ha de ser muy superior a la de los sistemas que poseemos hoy día. En un campo relacionado, pero que implica nuestro cerebro, hay que destacar que científicos de IBM desarrollaron chips de computadora capaces de emular el cerebro humano; con los cuales se espera aumentar, ostensiblemente, la capacidad de       cómputo de los ya poderosos súpercomputadores. Desarrollos como éste han llevado a que otros científicos, como el famoso Stephen Hawkins, consideren que hemos emprendido un camino que puede llevarnos a la aniquilación por parte de sistemas de inteligencia artificial tipo Skynet (ver Terminator). Para cerrar, si considerábamos que nuestro cerebro era una fortaleza inexpugnable, pues resulta que no. De hecho, los científicos han podido desarrollar técnicas no sólo para borrar recuerdos sino también para insertarlos en los cerebros de ratas de laboratorio. ¿Será que pronto nos venderán memorias felices para reemplazar nuestras tragedias del ayer?




7. De otro mundo 

Los días en que la humanidad consideraba estar en el centro del universo han quedado atrás hace varios siglos. Además, ahora sabemos que nuestro sistema solar no es el único sistema planetario ni de la galaxia ni, mucho menos, del universo. Según el sitio: http://exoplanets.org/ hasta el momento se ha podido determinar con absoluta certeza la existencia de 1523 exoplanetas: es decir, planetas externos al sistema solar, más 3303 cuerpos celestes candidatizados como exoplanetas. El descubrimiento de estos exoplanetas se ha acelerado gracias al uso del Telescopio Kepler y ya se han encontrado cerca de 200 exoplanetas de tamaño similar a la tierra. Para Abril de 2014, 21 de los exoplanetas descubiertos habían sido considerados como potenciales candidatos para albergar vida. ¿Cuándo se descubrirá la existencia de vida extraterrestre? El plazo parece acortarse cada vez más y de seguro nos llevaremos muchas sorpresas en el camino.



6.  Nuevo abecedario genético

El llamado abecedario (o alfabeto) genético de casi todos los seres vivos terrestres (excepto los arenavirus) está compuesto de cuatro letras: A, de Adenina, que se conjuga con T, de Timina, y G, de Guanina, que se conjuga con C, de Citosina. Estas letras representan las bases proteicas de nuestro ADN, pasando por plantas, peces, bacterias, perros y gatos. Este año, sin embargo, científicos en California, lograron, por primera vez en la historia, insertar un nuevo par conjugado en el ADN de bacterias de E. Coli (una de las más comunes en la tierra). Los científicos denominaron las nuevas letras X y Y; y, por supuesto, estas se combinan en el nuevo par conjugado X-Y. Los científcos fueron capaces de insertarlas tanto en fracciones del ADN como en fracciones del ARN. El descubrimiento abre la puerta a la creación de nuevos materiales y medicinas basadas en el dominio de la biología sintética.



Tomado de: American Association for the Advancement of Science Science 2014;346:1444-1449



@vigabalme

mercredi 19 novembre 2014

NY pasajero




Lado A. Las venas de la Gran Manzana no tienen el brillo iridiscente de las calles de ManhattanEn contraste, sus pasillos parecen pertenecer a un país ajeno; una nación (ex)-comunista de Europa del Este de aquellas que con ahínco los conservadores norteamericanos se empeñaron en repeler por décadas. Allí está el negro de raíces africanas, el blanco importado en empaque de puritano, el latino mixtura de sangres emigrantes, el turista de ojos frescos y tez curtida de millas de vuelo. Quizá en una estación cualquiera encuentras un músico local cobrando centavos por canciones. Algunos son orquesta, otros poetas heridos de pobreza, otros dúos espontáneos, otros sabor a canela y ébano.



Lado B. Monstruos, alienígenas, fantasmas. Corría por el barrio con los pies descalzos y detrás de lagartijas que encerraba en botellas. ¡Cazafantasmas! Hora de correr a sembrarse frente al televisor. El cine era mágico, la magia era independiente de la calidad de los efectos especiales. Egon, Ray, Winston, Peter, Janine y...¡Pegajoso! La alarma sonaba y el ulular de la emblemática ambulancia de los cazafantasmas se abría paso por las congestionadas calles de Manhattan. Mis ojos se alegraban y mi fiebre de película subía hasta hacerme salir a correr, de nuevo, sobre las candentes arenas del barrio Cooperativo en la capital de la Guajira.



Lado C. Money talks! Wall Street se yergue calmada en las noches. Los protagonistas de esta película andarán quizá de fiesta. Embriagados de dinero, embriagados de ambición. Jugadores frenéticos en la arena salvaje del capital. Juego de dominó vestido de traje y discursos rápidos, certeros y seductores. Gritería: compro, vende, apúrate, suena el reloj, caras largas, caras de póquer, lágrimas de arena y sal del otro lado del espejo.


Lado D. Viene Elmo, viene Woody, viene Winnie Pooh. Rebusque, rebusque, rebusque. En Times Square te asaltan y te cobran una módica suma por la foto. Te llaman, te acosan y sonríen para ganarse el pan (o el arroz, o la sopa). Debajo de la piel prestada quizá una cara latina, una cara asiática, una cara pálida. NY supervivencia. NY sueño americano sudor y dólares a cualquier precio.


Lado E. Estación 42-Street, Agosto 31 de 2014, ca. 1h20

@vigabalme

samedi 8 novembre 2014

Asunto de Vida o Muerte II: ¡Ay mi vida!

Aleister Crowley ha sido considerado "El hombre más malvado de la historia". En su búsqueda por convertirse en el más poderoso hechicero que la humanidad hubiese visto, Crowley se retiró por una temporada al Lago Ness, Escocia, con el objetivo de llevar a cabo un rito llamado: Abramelin. Entre los círculos de la magia negra, se presume que tal rito es tan poderoso que ningún humano debería intentar hacerlo. El rito consiste en pasar una larga temporada a punta de pan y agua levantándose cada madrugada, sobre las 3h00, para invocar demonios. El rito ha de seguirse hasta que, un día, se revele Belzebú mismo ante el mago; dándole a este último un poder incomparable. Luego de meses de intentarlo, Crowley salió decepcionado y mal nutrido del lugar para seguir su búsqueda de la conquista del trono mágico supremo. No hay ninguna evidencia que muestre que, además de haber malogrado su vida y la de sus semejantes que le siguieron la cuerda, su objetivo se haya jamás cumplido (ver documental). Lo cierto es que los misterios del denominado "más allá" siguen vedados al entendimiento humano.

En reacción a la primera parte de este "Asunto de Vida o Muerte", expresaba mi buen amigo y cronista Guido Polo (ver aquí su blog): "de algún modo sabemos de la vida, el más allá es una incógnita más llamativa". A lo cual, respondería yo: la vida es tan vasta y llena de elementos interesantes que, a mi parecer, el interés por el más allá no vale la pena. Una minúscula muestra de ello, y punto central de este rebuzno, es el hecho que ni siquiera hoy; luego de siglos de avance científico y filosófico, sabemos definirla.

¿Se ha hecho usted la pregunta: qué es la vida? Si sí, estoy seguro que su definición, al igual que la mía, es confusa, incompleta y plagada de más incógnitas que de respuestas. No hemos de inquietarnos, pues ni siquiera las mentes más preparadas en el asunto tienen la respuesta.

Primero, veamos lo que dice la RAE al respecto:

vida.
(Del lat. vita).
1. f. Fuerza o actividad interna sustancial, mediante la que obra el ser que la posee.
2. f. Estado de actividad de los seres orgánicos.
3. f. Unión del alma y del cuerpo.
4. f. Espacio de tiempo que transcurre desde el nacimiento de un animal o un vegetal hasta su muerte.


Como se puede ver, las cuatros primeras definiciones que la RAE provee son un poco incompletas y hasta vagas. Veamos las inquietudes que surgen:

Definición No. 1: Fuerza o actividad interna sustancial, mediante la que obra el ser que la posee. En este caso, la definición no dice qué sea la vida sino el mecanismo que supuestamente la define: Fuerza o actividad interna sustancial. Ahora, ¿qué quiere decir la RAE con sustancial?

Definición No. 2Estado de actividad de los seres orgánicos. Aquí, se presenta un problema colosal cuando se consideran seres como los virus y otros microorganismos que entran en actividad o viven sólo cuando encuentran un huésped. ¿Son entonces estos "seres vivos" mientras no hacen nada? Piénselo bien, bajo el mismo tipo de argumentación podemos debatir sobre la vida de los "zombies".

Definición No. 3Unión del alma y del cuerpo. Esto nos lleva a la sencilla, pero irresoluta, pregunta: ¿tienen alma las plantas, animales, procariotas, virus y hongos?

Definición No. 4: De entrada excluye todos los microorganismos.

Conclusión: Parece que la definición dada por la RAE, en realidad, no define mucho.

Vale la pena llevar, entonces, el caso a los estrados biológicos donde se busca una comprensión de la vida más allá del campo semántico; recordemos que la Biología es el estudio de la vida (¡!).

Un grupo de biólogos que están ávidos por conocer la definición precisa de vida son los astrobiólogos, i.e. aquellos que buscan determinar la presencia de vida en otros granos de arena de la mar cósmica.

De acuerdo con el sitio: Astrobiology Magazine, la confusión impera entre los astrobiólogos; incluyendo a los de la NASA, por supuesto. La razón es que para poder dar una definición precisa de "vida" hay primero que separar bien lo que está vivo de lo que no lo está. En esos campos, los científicos tienen problemas para definir si las células individuales de nuestro cuerpo, u otras células de otros animales y plantas, están vivas por sí mismas. O si, puede considerarse como vivo un programa de computador que es capaz de aprender y evolucionar. Por ejemplo:




O si, incluso, el fuego que crece, se reproduce y muere es una entidad viva. La misma inquietud puede extenderse hacia las estrellas que nacen, crecen y mueren y que, incluso, al morir dan origen a los elementos mismos que constituyen la vida.



En un excelente ensayo al respecto, Ferris Jahr de New Scientist (ver aquí), llega a la conclusión, brillantemente argumentada, de que la vida, simplemente, no existe. Todo su razonamiento se basa en nuestra incapacidad de definir qué está vivo y qué no; a pesar de haberlo intentado por siglos (quizá milenios). Finalmente, Jahr concluye que la razón de que la vida no exista es que es un concepto que nosotros inventamos y que nos sirve para clasificar y, quizá, en el mismo sentido sirve para afirmar nuestra autoestima.

Así, la realidad es que si uno explora los 63.200.000 que da Google al formular la pregunta (en Inglés), es seguro que no se llega a una definición clara, nítida e imparcial de vida. En concordancia con Jahr, me empieza a parecer a mí que este concepto, el de vida, es una especie de espejismo nacido de nuestra propia concepción y necesidad de clasificar y medir antes que una ley natural. Sin embargo, creo que en la búsqueda del mismo hemos aprendido y seguiremos aprendiendo mucho más del universo de lo que jamás habíamos pensado. ¡Qué apasionante es la vida en sí misma!

El darnos cuenta que la búsqueda de una definición de vida es infructuosa plantea una profunda reflexión filosófica y científica sobre la existencia del denominado "Más Allá". En esencia, si la definición de vida es un espejismo, el "más allá", al que tantos Crowleys han y siguen rindiendo culto, se reduce a una ficción sin valor mayor a la que experimentamos cuando soñamos en las noches.

La sentencia bíblica: "polvo eres y en polvo te convertirás" anuncia la realidad de aquel inevitable momento en el que dejamos de funcionar como entes creadores, pensantes, intérpretes y transformadores de nuestros alrededores y la descomposición de nuestras células en unidades elementales que serán reincorporadas al seno de la naturaleza. Nuestro cuerpo y nuestra existencia humana; producto de un arreglo molecular irrepetible y de incontables interacciones moleculares y sociales, son un pasajero temporal montado en la nave del tiempo. A nuestro alrededor, toda la complejidad y hermosura de estados de no equilibrio han llevado a la evolución de elementos simples y energía en carnavales de colores, olores y sonidos. Todo anuncia el romper de las olas de la evolución contra el inánime cero absoluto.

@vigabalme



lundi 3 novembre 2014

La Rasquiñita


Cuando Nairo Quintana ganó la cronoescalada de Bassano del Grappa-Cima en la última edición del Giro d'Italia, el menudo y cobrizo titán del ciclismo colombiano declaró a la prensa internacional que él tenía que ganar esa etapa. En realidad, no era necesario pues su ventaja en la clasificación general de la competición era suficiente para conservar el liderato de manera, relativamente, cómoda. Sin embargo, le era indispensable demostrar que su conquista de la camiseta rosa de líder no había sido producto de alguna "viveza" de su parte. Nairo había recibido críticas por una supuesta violación del reglamento al no obedecer una señal de neutralización durante la etapa 16. Por ello, no con poco orgullo, aquel día de duro ascenso se desprendió de la rasquiñita que le produjeron tales críticas.

Cuando en 1993 Colombia goleó a Argentina en el estadio Monumental de River, estoy seguro que ninguno de nosotros; los que asistimos por televisión y los pocos compatriotas que allí estuvieron presentes, sintió pesar al ver que les marcábamos 5 goles al bicampeón del mundo. Por el contrario, presenciar como nuestra selección hacía ver rancio el tango argentino a punta de toques de balón se convirtió en símbolo histórico de que la albiceleste no podía seguir viéndonos como equipo de fútbol de patio. La superioridad de los chés quedó arrutanada en una esquina triste esa tarde de Septiembre.

Ahora que, con la distancia de los meses, rememoro el partido de cuartos de final de Colombia frente a Brasil, me sobrevive la misma rasquiñita de aquel día. Falló la templanza. El primer tiempo estuvo plagado del nerviosismo de nuestros jugadores; tanto así, que la deslucida seleçao brasileira brilló en los primeros 45 min. El segundo tiempo fue otra historia. Sin importar el resultado final, lo esencial, creo yo, es que sobreviva en el jugador nacional el sentimiento que hay que sacarse esa espina y que se es capaz de hacerlo. La rasquiñita que queda no se pasará hasta que no se derrumbe ese ídolo carioca y se dé paso a otro capítulo del fútbol nacional: ¡Ya se está escribiendo una nueva historia y el avenir pinta mejor que nunca antes!

La rasquiñita es, desde el punto de vista de este escrito, el preámbulo necesario para superar un desafío y se torna indispensable en la búsqueda de la superación. Por tanto, la rasquiñita a la que aquí se hace mención no es la misma del que abre una venta de empanadas frente a la de su vecino y, además, las vende a menor precio sólo para arruinarlo. Ni se trata tampoco de la rasquiña viral de los que en lugar de llamarle la atención de manera cordial pero firme al que se coló en la fila se ensañan contra él como si hubiera cometido un delito de lesa humanidad. No es tampoco la rasquiña asesina del que no duda en atentar contra la vida del prójimo porque no carga un peso en el bolsillo. Ni tampoco la rasquiña corrupta del político que sólo da importancia a aquello que le llena la casa de regalías mal habidas. De estas y otras rasquiñas enfermizas está plagada nuestra sociedad y por ello nos enfrascamos en no darle solución aún a problemas sociales similares a los de la Edad Media o de la antigua Roma.

¡Es indispensable despertar en nosotros la misma rasquiñita de Nairo! Aquella que nos pone a competir con los mejores; porque podemos ser los mejores. Las capacidades humanas no están circunscritas a un grupo étnico o civilización en particular. Antes de Europa, los Egipcios eran la sociedad más avanzada de aquella era. Luego fueron los Griegos y los Romanos. Y luego, cuando el oscuro manto monopólico de la iglesia cubrió Europa, fueron los Árabes quienes hicieron florecer el libre pensamiento, las artes y las ciencias. Luego, las guerras y el colonialismo terminaron inclinando la balanza al pragmático y eficaz modelo norteamericano. A presente, es el tigre mecánico chino el que parece abrirse paso. Así, las antorchas del progreso humano han pasado de un lugar a otro. Lugares en los que los complejos van quedando atrás y la gente se apropia de su destino.

Confieso que este rebuzno lo escribo ahora con menos pasión que en el momento en que se me vino a la cabeza; por allá en aquel 4 de Julio. Y que, en el camino, algunas ideas se diluyeron. Sin embargo, sobrevive en mí el sentimiento y la necesidad de decirle a cada niño que veo por ahí pateando un balón: ¡Ya está bueno con esos brasileños!, ¡Hay que ganarles y dejar de parecer sus hijos macos!, ¡Aquí también se puede ser el mejor!

P.S. Dejo este video con la narración argentina del 5 - 0. ¡Nótese la ardidez imperante de los narradores!




@vigabalme

dimanche 26 octobre 2014

Asunto de vida o muerte

Sábado 8:30 de la noche, Germán García y García -Gegar TV-, la extinta programadora del búho de neón, presentaba sus "Clásicos del Terror". La voz firme, profunda y bien articulada de Hernán Castrillón recibía al espectador y ambientaba la atmósfera lúgubre de las cintas que se exhibían a continuación. Debajo de la mesa del comedor estaba yo. Sin atreverme a ver, escuchaba encogido de miedo el relato del presentador y luego sacaba mi cabeza de debajo del mantel para ver la pantalla del televisor por unos instantes; justo antes de que apareciera el monstruo de la película; unas veces era Drácula, otras el Diablo y otras veces Frankenstein. A diferencia de Drácula y del Diablo, Frankenstein nunca me paralizó de miedo.

Mis confusos recuerdos de las citas con los Clásicos del Terror fueron rápidamente colonizados por la imagen de un monstruo bonachón y medio tonto, marido de una especie de vampiresa, Herman Munster:


Esta imagen popular y jocosa de Frankenstein persistió por años en mi imaginación y no fue sino hasta 1994 que descubrí la verdadera dimensión del monstruo, gracias a la sobrecogedora cinta de Kenneth Branagh: Mary Shelley's Frankenstein. Gracias a esta película, supe que Frankenstein es, de hecho, el científico Victor Frankenstein y no el monstruo. Más allá de ello, el monstruo de Frankenstein, interpretado de manera brillante por Robert de Niro, se confunde con su inventor en la búsqueda de su humanidad. De la impresión de una farsa caricaturesca, el monstruo y su creador se convirtieron en un único ser filosófico de dos caras de la humanidad.



La transformación de la trágica novela de la inglesa Mary Shelley de una profunda reflexión sobre la naturaleza de la vida, el conocimiento científico y la búsqueda de nuestra humanidad en una farsa cómica empezó a darse al poco tiempo de la publicación de la obra original.

La novela de Shelley, también llamada El Moderno Prometeo, fue publicada en 1818 en pleno auge de la revolución industrial. Inglaterra había derrotado a la Francia de Napoleón y Sir Humphry Davy encantaba al imperio Británico con sus demostraciones sobre el poder de la electricidad y su relación con la naciente rama de la ciencia llamada Química.

Sin embargo, ni Davy ni los demás científicos de la época habían podido definir qué es la electricidad. En el aire pululaban las especulaciones. En varios círculos científicos se había arraigado la idea que la electricidad estaba asociada con un cierto fluido vital.

En los "ranescos" experimentos del italiano Galvani, el científico cortaba las patas de una rana y las conectaba a una batería con lo cual éstas empezaban a contraerse y estirarse. Galvani asoció su descubrimiento a lo que él llamó: magnetismo animal. Una fuerza invisible inherente a los seres vivos que persiste más allá de su muerte. El magnetismo animal también fue defendido por el alemán Mesmer quien alegaba que era posible curar diversas enfermedades gracias al influjo de una fuerza vital transmitida, en un principio, por imanes y, luego, por él mismo. La explicación de Galvani sobre el origen de los retorcijones de las patas de los batracios fueron demostradas erradas por su paisano Volta, mientras que los tratamientos magnéticos de Mesmer fueron rechazados por la Académie des Sciences y la Académie Nationale de Médecine francesas. Sin embargo, estas ideas tomaron arraigo entre los denominados Vitalistas.

En la novela de Shelley, se representa la búsqueda intensa del hombre por dominar las fuerzas íntimas de la naturaleza. En su laboratorio sembrado de cadáveres desmembrados, el doctor (en medicina) Víctor Frankenstein intenta con pasión y energía obsesiva encontrar la manera de convertirse en el dios de la creación. Noche tras noche, día tras día, su obsesivo desvelo lo lleva a perfeccionar sus técnicas de cirujano para ensamblar las partes de un ser al cual él pueda inyectarle vida. El hombre es una máquina que puede ensamblarse a partir de sus partes y su vida se enciende gracias al fluido vital asociado con la electricidad. La consecución de su objetivo lo embarcará rumbo a la pérdida de su humanidad misma y, al tiempo, embarcará al lector en un viaje de descubrimiento sobre la evolución de nuestro carácter humano.

De manera más profunda, la convergencia de todas estas ideas llevarían a explorar preguntas gemelas de nuestra consciencia: ¿qué es la vida?, ¿de dónde viene?, ¿qué pasa al morir?

Es natural que estemos enamorados de la vida y que nos dé pavor la muerte. Roberto Gómez Bolaños, el genial Chespirito, ha dicho: la muerte es el acontecimiento futuro más importante*. Por ello, es natural sentir fascinación frente a esta parte fundamental de la vida. Sin embargo, tal fascinación puede llevar por los caminos del dogma y el misticismo.

Así como el género del terror se basa en la danza macabra de nuestros temores frente a la muerte para, unas veces, hacernos esconder bajo la mesa del comedor, la charlatanería y la superchería van de la mano del bolsillo de aquel que quiere explicaciones rápidas que satisfagan su anhelo de encontrar las llaves del reino del más allá. ¿No sería mucho más satisfactorio, primero, querido lector, definir qué es vida, antes de embarcarnos hacia la búsqueda de lo que está en el más allá?



*Chespirito sobre la muerte: http://www.youtube.com/watch?v=dpKSjkrgaH4


@vigabalme

lundi 13 octobre 2014

Ébola


Esa noche, desesperado con mi respiración de acordeón desvencijado y mis ojos como brasas de carbón, acudí a la clínica de Sanitas buscando atención médica. Recuerdo haber llegado sobre las 7 de la noche. Me dirigí a la ventanilla de atención donde me indicaron que esperara para hacerme el "triage". Pasó media hora. Pasó una hora. Pasaron tres horas de resignada espera.


Ebola virus budding from cell, SEM

Imagen SEM que muestra al virus del Ébola atacando una célula. 
Tomado de: http://www.sciencephoto.com/media/609989/view

El Ébola es una enfermedad atemorizante. Sus síntomas son en extremo dolorosos y el pensar en que éstos incluyen el desarrollo de hemorragias internas y externas es un hilo frío que estrangula la templanza de cualquier persona.

Curiosamente, el agresivo virus del Ébola es tan frágil que no puede sobrevivir más de un día fuera de los fluidos corporales de su víctima. Así, no es posible contagiarse de Ébola al acostarse en una cama donde haya estado un paciente enfermo una vez ésta se haya secado. De la misma manera, viajar en un avión con una persona contagiada no conlleva a una infección automática ya que el virus no se transmite por vía aérea como lo hace la gripe. El Ébola no posee la coraza protectora de otros microorganismos que pueden sobrevivir años sin agua, por ejemplo. Sin embargo, en cuanto a los humanos se refiere, el Ébola acude a un método maquiavélico de supervivencia.

Como lo plantea el Prof. Benjamin Hale (ver aquí su artículo), el Ébola sobrevive depredando nuestra naturaleza humana. En días pasados, el New York Times presentó la desgarradora crónica de una madre liberiana que adquirió la enfermedad y que dió a luz, de manera prematura, a una bebé (ver aquí). El padre había sido tratado por la enfermedad de manera reciente. En la premura del parto, los abuelos llevaron a la madre, quien había estado padeciendo los síntomas del virus desde hace días, a un centro asistencial. Después de tomar las medidas de precaución debidas, el personal médico procedió a inspeccionar el vehículo en que llegaron y encontraron a la madre muerta. Nadie sabía cómo proceder con la bebé quien había sido infectada por el virus. Nadie tocó a la bebé. La confusión reinó.

En los países de África afectados por la epidemia, el Ébola ataca el ya rasgado tejido social a través de la propagación del miedo, la superstición, la impotencia y el dolor psicológico. Liberia, Guinea y Sierra Leona son países ya plagados de guerra, desigualdad social, bajas tasas de educación y pobre infraestructura de atención en salud. Ante tal escenario, el Ébola ha encontrado un nicho a la medida de las debilidades humanas que favorecen su reproducción. En él, se ha expandido de manera exponencial, como nunca antes, en medio de la mirada indiferente inicial de la comunidad internacional.

¿Qué pasaría si llegase el Ébola a Colombia? Es una pregunta razonable dado el inevitable flujo humano propio de nuestra era globalizada. Si como en el caso de mi ataque alérgico y otros millones de casos similares o de mayor gravedad que se presentan a diario en nuestro país, prevalece la indiferencia glacial y descoordinada de nuestro sistema de salud monetarizado, las perspectivas son sombrías. La mejor defensa contra un enemigo como este virus es, de hecho, fortalecer nuestra humanidad misma a través de actos de solidaridad y del abandono del egoísmo, la charlatanería, la superchería y la aceptación de que el bienestar de todos es la llave de nuestra propia tranquilidad y plena felicidad.

@vigabalme

samedi 13 septembre 2014

El cerebro humano


Una mañana de infancia, mis papás me llevaron de visita a la casa de su comadre. Jugando en el piso, me encontré por casualidad con un curioso objeto. Una placa con dos huecos planos que se internaban en el blanco repello de cal de la pared. Con la curiosidad propia de cualquier otro niño, me dispuse entonces a introducir mis dedos en aquellos misteriosos huecos. Al verme, la comadre me previno inmediatamente: ¡Víctico!, no vayas a meter los dedos en el toma que te va a patear. ¡Eso no tiene patas!, respondí yo. Aunque mi respuesta no era ilógica, por experiencia propia o ajena, mis mayores tenían claro el peligro que encerraba la "patada" que podía recibir. Para mí, ignorante de aquel riesgo, tenía más sentido preguntarse: ¿Dónde estaban las patas de las que me hablaban? Aquella placa no tenía ningún parecido con un burro o animal similar. Con risas cariñosas, me explicaron que aquello era un tomacorriente y que las patas eran corriente eléctrica y que puede matar. Aunque la respuesta bastó para impedir mi impulso de meterle los dedos al tomacorriente, lo cierto es que sobrevivió en mí la curiosidad de saber qué eran las patas de la electricidad.
Esta anécdota, quizá trivial, pone de manifiesto una diferencia fundamental entre lo que aceptamos como conocimiento común, a saber popular, y la búsqueda de conocimiento científico.

El órgano más complejo del cuerpo humano es el cerebro. Por siglos, se consideró que toda nuestra razón y sentimientos residían en el corazón. Es un pensamiento natural; pues son los latidos del corazón los que elevan su voz cuando experimentamos emociones diversas. En comparación, el cerebro solo lo percibimos, de modo latente, cuando nos duele la cabeza. Sin embargo, es nuestro cerebro el que traza la raya entre nosotros, los seres humanos, y los demás seres vivos del planeta.

Desde el punto de vista evolutivo, los humanos poseemos tres cerebros. El más antiguo es el cerebro reptiliano; denominado así porque es, en esencia, el mismo que poseen los reptiles. El cerebro reptiliano se encarga de controlar las tareas básicas que necesitamos para sobrevivir: respirar, regular la temperatura corporal y guardar el equilibrio. En él también residen instintos primarios de supervivencia como la agresividad y el temor ante situaciones percibidas como peligrosas. Sigue el cerebro mamífero también llamado límbico en el que se almacenan recuerdos de experiencias y se las clasifica en agradables y desagradables. Este es el cerebro que controla nuestras emociones. Literalmente hablando, los cerebros reptiliano y mamífero son nuestro contacto directo con el mundo que nos rodea. Finalmente, está el neocórtex, o isocórtex, que es el recién llegado evolutivo. El neocórtex es el cerebro humano. En el cerebro humano reside nuestra capacidad intelectual, la habilidad de comunicarnos a través de un lenguaje, nuestra imaginación y nuestra conciencia.

Aunque el neocórtex ocupa la mayor parte de nuestra cabeza; i.e. su masa corresponde al 85% de la masa cerebral, la información que recibe del mundo exterior está filtrada por los cerebros reptiliano y mamífero. De allí se desprenden nuestras célebres batallas entre el corazón y la conciencia. En consecuencia, puede decirse que pensar no es, literalmente, nuestro primer impulso como seres humanos. Pensar, desde el punto de vista intelectual, no es nuestro primer recurso de sobrevivencia.

Un experimento que muchos, de manera inconsciente, realizan cada fin de semana, pone de manifiesto la funcionalidad de nuestros tres cerebros evolutivos. El consumo de alcohol adormece el neocórtex. De hecho, el alcohol sería el analgésico ideal sino fuese por sus nocivos efectos secundarios. Las moléculas de etanol viajan a través del torrente sanguíneo directo hacia los receptores neuronales del neocórtex y se encargan de inhibir interacciones químicas fundamentales que permiten su funcionamiento e interacción normal con los cerebros reptiliano y mamífero. Con la saturación paulatina de tales receptores neuronales, los cerebros reptiliano y mamífero van tomando el control de nuestras acciones. Es por eso que. la mayoría de los seres humanos, a medida que se van emborrachando comienzan a dejar fluir sus emociones y a perder sus inhibiciones. El cerebro humano se va quedando callado y con ello "Pepe Grillo" deja de grillar. Dado que cada cabeza es un mundo, algunos al emborracharse tienden a volverse agresivos; ¡cerebro reptiliano al mando!, mientras que otros lloran, ríen y prometen en medio de nostalgias; ¡cerebro mamífero al mando! Otros, como el famoso Edgar Alan Poe pueden potenciar su vena literaria consumiendo alcohol mostrando cómo el adormecimiento parcial de su neocórtex dejaba escapar por su pluma sus más profundos temores a través de lúgubres historias de alto valor estético y profundidad literaria.

El conocimiento científico está basado en una confrontación de lo que pensamos y la realidad de los hechos. A diferencia de las creencias, la ciencia nos obliga, quizá de manera inclemente para "el alma", a abandonar aquellas ideas e intuiciones que no se ajustan a la realidad de la experimentación a pesar de lo mucho que creamos en ellas o que deseemos que sean ciertas. Con mucha frecuencia, el conocimiento común; lo que todo el mundo sabe, se convierte en un obstáculo para realizar nuevos descubrimientos. Volviendo al principio de este escrito, si bien todos sabemos que la corriente "patea", la explicación escueta de que patea porque tiene electricidad coarta una comprensión profunda del fenómeno detrás de tales patadas. En este sentido, es el cerebro humano quien prima como juez y arquitecto del conocimiento científico pues la salida fácil, y, de hecho, de menor costo energético, es aceptar que las cosas son como son porque sí está profundamente arraigada a los cerebros reptiliano y mamífero. Aunque todo buen científico requiere de cierta chispa de pasión y aprecio por su labor (lo que proveen los cerebros reptiliano y mamífero) es su capacidad de discernir y construir de manera racional explicaciones que correspondan a la realidad lo que le permite avanzar en su búsqueda de la verdad.

A diferencia de nuestros cerebros reptiliano y mamífero, las exploraciones del cerebro humano trascienden los sentidos y pueden ahondar la realidad imperceptible de la naturaleza cuando se usa el método científico como brújula de navegación. Ello ha sucedido innumerables veces en la historia de la ciencia y ha contribuido a que, por ejemplo, el autor de estas líneas esté usando un computador portátil en vez de lápiz y papel para escribir. Es más, en un giro fascinante de la evolución, nuestro cerebro humano ha usado y está usando las herramientas de la ciencia, que él mismo creó, para explorar su naturaleza misma. ¡Qué gran prodigio de la naturaleza!



@vigabalme





mardi 12 août 2014

Planetario: una historia de ciencia ficción

Tic, tac, tic, tac...

A pesar del paso de los siglos, el reloj de pared de la casa de Arturo seguía siendo el mismo dispositivo rudimentario de sus abuelos. Ese día, él lo seguía con paciencia en su danza monótona . Atrás iba quedando el pesado fardo de nostalgias que habían marcado sus decisiones anteriores. Primero fue aquella sorda adolescencia en la que prefería refugiarse en las historias de gestas sociales ajenas: revolución francesa, revolución cubana, socialismo del siglo XXI. Todo narrado en libros impresos comparables a papiros caducos que ya nadie leía, con excepción de nostálgicos en vías de extinción como él.

El último libro impreso databa de 228.37 años atrás y cerró, definitivamente, la era del papel para darle paso a las versátiles láminas digitales cuya memoria cuántica era suficiente para almacenar todo el conocimiento humano acumulado desde los albores de la historia. Sin embargo, Arturo prefería los viejos libros herencia de su familia. Aquellos cuyas páginas costaba trabajo separar y lo forzaban a humedecerse la punta de los dedos para poder descubrir los peligros que le esperaban a los exploradores de otras épocas y cuyos viajes interocéanicos maravillaron una vez a la humanidad.

El mundo se había por fin convertido en una heterogénea aldea global que se podía recorrer en cuestión de minutos. Las fronteras de los sueños se habían movido. Arturo recordaba a sus parientes que habitaban Marte. Las primeras colonias marcianas lograron soportar el vacío sentimiento de la lejanía de sus congéneres terrícolas y, después de varias generaciones, el planeta rojo se encendió con las verdes pasturas y enormes árboles importados del vecino planeta azul. El agua fue llevada desde cometas robados al cinturón de asteroides y que ahora orbitaban Marte a voluntad de los ingenieros terrícolas. Cuando Arturo leía las historias de ciencia ficción de los siglos XIX y XX sobre marcianos verdes y ojos protuberantes, no podía evitar reírse imaginando que sus parientes se habían transformado en seres semejantes.

Arturo leía con voraz interés los relatos míticos de pueblos arrasados por huracanes cataclísmicos y familias condenadas a cien años de soledad. Todos, relatos de un mítico escritor nacido en una Colombia extinta en la cual primaba la ya ahora olvidada ambición de poseer, dominar y mandar por vías de sangre. Arturo leía no sólo aquellas novelas, sino las historias de la época y en su silencio imaginaba y se asqueaba de aquella violencia. Sin embargo, anhelaba haber nacido en esos tiempos turbulentos y haber participado en la transformación definitiva de aquella sociedad en una nación progresista que luego daría a luz algunas de las mentes más brillantes de la humanidad.

Hoy, Arturo dibujaba una sonrisa con las cenizas de aquel período de su vida. El arcaico reloj dio la hora. Y él, en su uniforme, se dirigió al teletransportador. Segundos después se encontraba reunido con sus colegas astronautas. Arturo celebraba aquel día sus 143 años. Estaba en la plenitud de su forma física y era hora de embarcarse en la más grande aventura de su vida. Arturo hacía parte de la tripulación escogida por la federación terrestre para visitar el primer exoplaneta con vida comprobada. Lo bautizaron Exobio-I y había sido descubierto dos siglos antes, pero sólo hasta ahora, en 2463, se había podido desarrollar la tecnología necesaria para construir una nave espacial capaz de navegar desde nuestro brazo de la vía láctea hacia otro más cercano al centro mismo de la galaxia.

Nadie sabía a ciencia cierta lo que encontrarían en aquel planeta que orbitaba dos soles. En su mente, Arturo volvió a recorrer las páginas de sus libros favoritos y tuvo la certeza que Exobio-I sería, en esencia, una imagen en el espejo de aquella mítica aldea de huevos prehistóricos que tantas veces recorrió en los delirios nostálgicos de su adolescencia; un Macondo interestelar por descubrir. El reloj de su casa marcó las doce; un vallenato sonó en lugar del tic tac.

En twitter: @vigabalme



lundi 4 août 2014

Dulce compañía


Salir a vender mercancía con mi papá siempre era interesante. Lo ayudaba a cargar la carreta de muebles, ollas a presión India Express, juegos de caldero Imusa, cortinas, poncheras, juegos de sábanas, manteles, mecedoras, planchas, licuadoras y otros artículos del hogar típicos de los cacharreros. Aunque no siempre se podía; pues a veces llegaba el medio día sin que hiciéramos la primera cuenta, mi mayor ilusión era llegar a una tienda y pedir plata para una gaseosa.

¡Ah!, el refrescante cosquilleo de aquellos mágicos líquidos con sabor a naranja, tamarindo, manzana, piña (bueno, la de sabor a piña nunca me gustó mucho) y...El picantico original de la Coca Cola; por cierto, esta última, es también buena para aflojar tuercas y tornillos oxidados gracias a que contiene ácido fosfórico. ¡Sí!, una gaseosa y una galleta de coco, y, a veces, un suculento almuerzo de gaseosa con pan y salchichas de latica; éstos eran, para mí, los premios dorados de una jornada laboral junto a mi padre bajo el sol guajiro de unos veinte y tantos años atrás. Y entre más gaseosas, más regocijo.

No era el único en la familia. Una de las hazañas de mi hermano mayor era tomarse una Coca Cola de un solo sorbo. Era admirable su capacidad para aguantar el picor intenso de las burbujas de dióxido de carbono (CO2) en el paladar y la nariz. ¡Qué proeza!, pensábamos sus amigos y yo.

Una bebida gaseosa es una mezcla de jarabe saborizado, CO2 (el mismo gas que expulsamos al respirar), y agua. El principal componente es el jarabe que se diluye al 86%. Es decir, en un litro de gaseosa hay 860 mL de agua y 140 mL de jarabe. Este jarabe se compone de múltiples colorantes naturales y artificiales, conservantes y, principalmente, azúcares como la glucosa; el azúcar extraído de la caña de azúcar, y la fructosa; el azúcar presente en las frutas y el maíz. Se estima que la cantidad de estos azúcares en una lata de gaseosa "personal" (más o menos 350 mL) es de 33 gramos; es decir, unas 8 cucharaditas de azúcar para el café.

Los azúcares son las baterías moleculares de la vida. Las plantas en su proceso de fotosíntesis tranforman la energía lumínica en energía química mediante un proceso que, puesto de manera muy simple, implica la conversión de seis moléculas de CO2, agua (H2O) en glucosa C6H12O6 (u otro tipo de azúcar) y oxígeno (O2). ¡Noten que la glucosa tiene seis carbonos (C6) de modo que, como en cualquier tienda de barrio, la naturaleza cuadra caja!

Mientras que las plantas producen azúcares, los humanos hemos desarrollado un gran apetito por ellas. Los azúcares son una rica fuente de energía de fácil acceso y nuestro organismo ha evolucionado de modo que, al degustarlas, el cerebro produce una cascada de sensaciones placenteras. Un experimento reciente, hecho con ratones de laboratorio, mostró que comer las famosas galletas Oreo; ricas en azúcares y grasas, estimula las mismas regiones del cerebro que cuando se consume cocaína. Sin embargo, hasta la fecha, no se reportado ningún caso de Oreo-adicción en los medios. Lo significativo de este estudio es que se demostró una correlación entre el placer que produce alimentarse con azúcares (y grasas saturadas; otro componente clave de las galletas en cuestión) y la adicción. Tal parece que dejar de comer alimentos azucarados puede ser, entonces, tan problemático como dejar el cigarrillo, por ejemplo.

En años recientes se ha comenzado a cambiar el paradigma que el consumo de grasas; que vale la pena decirlo, son los compuestos que más sabor aportan a los alimentos (¡Entre más grasoso, más sabroso!, dice un adagio gastronómico), es el principal causante de problemas de obesidad. La evidencia muestra que el aumento excesivo en el consumo de bebidas gaseosas y otros dulces amigos de la sed es un factor más decisivo para la obesidad.

En Estados Unidos; líder mundial en cuanto al porcentaje de pacientes obesos, se han iniciado masivas campañas públicas para concientizar a la población sobre el riesgo que representa el elevado contenido de azúcar en gaseosas, jugos y té embotellados. Incluso, en Nueva York, el ex-alcalde Michael Bloomberg intentó restringir, sin éxito, la venta al público de bebidas gaseosas de volumen mayor a 433 mL.


Afiche de campaña contra el consumo de bebidas azucaradas en el metro de San Luis, Missouri, Estados Unidos (2013).

En países como México, también se ha podido ligar el aumento en los casos de obesidad con el aumento en el consumo de bebidas y alimentos con alto contenido de azúcar. Una imagen recurrente para mí, en este caso, es la de las generosas bolsas de agua de jamaica (¿se acuerdan del Chavo del 8?) que venden en las calles de Zihuatanejo por un precio menor al de una gaseosa.

En Colombia, ha habido un considerable aumento en el volumen de las bebidas gaseosas en los últimos años. Recuerdo, lo contento que me puse el día que anunciaron la gaseosa de 350 mL. Poco tiempo atrás, se empezaron a vender gaseosas en botellas de 500 mL, en reemplazo de las de 350 mL, que más de un entusiasta, como yo, ha disfrutado al mismo precio. Lo anterior sin contar, que las gaseosas empacadas en botellas de plástico (PET -tereftalato de poliestireno-) vienen en los formatos: personal de 500 mL y familiar de dos litros en adelante. Ni hablar de la Pony Litro; vaticinada por el célebre humorista caribeño "Cuchilla Geles".

Por supuesto, el consumo ocasional de una bebida azucarada no constituye un riesgo grave para la salud. Como en muchos aspectos de la vida, el riesgo verdadero está en el hábito y exceso constantes.

El exceso de glucosa en la sangre lleva a una degradación de los vasos sanguíneos, el sistema nervioso y, eventualmente, a un deterioro de órganos como el corazón, el hígado, los riñones y el páncreas. Uno puede imaginarse que este exceso de glucosa opera en nuestro cuerpo de manera parecida a cuando uno usa una salmuera como refrigerante en el radiador de su carro. Al principio, la refrigeración es más rápida (la emoción azucarada en nuestro organismo), pero, al poco tiempo, la salmuera ataca las tuberías, las corroe y destruye el sistema entero.

En general se ha asociado el exceso de glucosa en la sangre con: (i) la diabetes. (ii) enfermedades cardíacas, (iii) neuropatías que pueden llevar a amputaciones de extremidades, en especial las piernas, y la muerte. (iv) retinopatías que llevan a la ceguera. (v) enfermedades de los riñones. (vi) la enfermedad de Alzheimer; la variedad de demencia senil más destructiva. y, ¡atención vendedores y amantes de los fritos! (vii) alta tensión arterial, colesterol y problemas del hígado.

Para la diabetes, el incremento en el número de casos reportados es tan alto que se habla de epidemia global. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 347 millones de personas padecen diabetes en el mundo. A su vez, en 2004, 3.4 millones de personas murieron por causas asociadas a altos niveles de glucosa en la sangre. Estas muertes se dieron, sobre todo, en los países subdesarrollados. Como colombianos, esta última tendencia no ha de extrañarnos pues mientras uno interpone una acción de tutela y luego hace la larga fila de espera en la entidad promotora de salud, para recibir los medicamentos apropiados para tratar la enfermedad, la glucosa sigue intoxicando dulcemente el organismo.

Las bebidas gaseosas no son las únicas ricamente endulzadas. Jugo de tomate de árbol, jugo de tamarindo, jugo de corozo, jugo de piña, jugo de patilla con Kola Román, jugo de guanábana, jugo de lulo, jugo de feijoa, jugo de torombolo, limonada, agua de panela con limón, jugo de mora, jugo de lulo, jugos hit, ¡"100% naturales" ¿En serio?!, Frutiño, Naranyá, etc, hacen parte fundamental de la dieta regular de una familia colombiana, llevando consigo la dulce pero tóxica compañía del exceso de azúcar.

En mi caso, mi dulce adolescencia me ha costado, por el momento, múltiples visitas al odontólogo para reparar la mitad de mis carienturientas muelas; doy fe que es cierto aquello que nos enseñan desde niños: azúcar y caries van de la mano. Por su parte, mi hermano ha tenido ya uno o dos pre-infartos. Mi papá, quien sigue en su oficio de cacharrero, no padece de ninguna de las enfermedades aquí mentadas. ¡Él no ha requerido hacer estudios de doctorado para saber que el agua es mucho mejor para la sed!

En twitter: @vigabalme


Referencias

1. Contenidos de azúcar en bebidas gaseosas: http://nutrition.about.com/gi/o.htm?zi=1/XJ&zTi=1&sdn=nutrition&cdn=health&tm=190&f=10&su=p284.13.342.ip_&tt=65&bt=7&bts=7&zu=http%3A//ndb.nal.usda.gov/ndb/foods/show/4337

2. Cómo se prepara una gaseosa: https://www.youtube.com/watch?v=yNYJG3WFPak

3. Fotosíntesis y azúcares: http://science.howstuffworks.com/environmental/earth/geophysics/earth3.htm

4. Libro recomendado: http://global.oup.com/academic/product/lethal-but-legal-9780199937196;jsessionid=A21232360708D915CF58FBF991B597ED?cc=gb&lang=en&

5. Diabetes y Alzheimer: http://www.newscientist.com/article/mg22029453.400-are-alzheimers-and-diabetes-the-same-disease.html#.U98ubfmSwRp